martes, 21 de abril de 2009

Barquito de papel

Hoy, Hernán Nadal no recordó cómo armar un barquito de papel… Y yo comenté “¿Cuántas cosas olvidamos cuando crecemos, no?”
Y me quedé pensando en ello. De chico yo sabía jugar a la bolita, me sabía de memoria las reglas del “OPI”, del gallito ciego, de la quema. Podía recitar cómo el Padre Nuestro una lista interminable de súper héroes, de mutantes, de figuritas difíciles de encontrar en “La máquina del tiempo”.
Jugaba a “la tapadita”, a la mancha venenosa, veía Invasión Extraterrestre y me cagaba de miedo!! Era fanático de Odisea Burbujas, de Aprendijuegos….
En el barrio había gente que jugaba al Mensú, al elástico, a la escondida… Creo que algunos siguen escondidos.
Pero yo, olvidé algunas cosas. Como Hernán, no recuerdo cómo se hacia un barquito de papel, ni un gorrito de pintor, ni siquiera… un avioncito de esos que tirábamos al techo recubierto de telgopor del aula del quinto grado.
Yo olvidé, y me da mucha bronca.
Éramos tan sabios, tan inteligentes, que sólo aprendíamos aquellas cosas que nos serían útiles en ese instante, en esos días. No nos interesaba el dólar, la crisis, los 5 presidentes en una semana, Bush, la droga, los curas abusadores, los muros de zona norte, la derecha, la izquierda o el medio. Sólo vivíamos el hoy, y si teníamos un poco de suerte, ese "hoy" era buenísmo. Quiero volver a jugar, a perderme...
Los invito a jugar conmigo, a gritar bien fuerte de una puta vez Piedra libre para todos mis compañeros………!!!!

2 comentarios:

Mauro Fernández dijo...

Amén. Quiero volver a jugar, volver a reír, volver a soñar. Pero quiero aprender también a hacer algo que de chico nunca me salió. Quiero aprender a jugar solo.

Anónimo dijo...

Pisa pisuela color de ciruela!!
Te comparto este, también, de Khalil Gibran, La Zorra.
Una zorra miró su sombra al amanecer, y dijo: "Hoy preciso un camello para almorzar". Y pasó toda la mañana buscando camellos. Pero al mediodía volvió a ver su sombra, y dijo: "Con un ratón me bastará".
Saludos!

Gime